En el Día de las personas sin hogar Cáritas invita a “Caminar juntos”
• Cáritas Málaga atendió el pasado año a más de 500 personas sin hogar a través de sus centros y proyectos.
• El 70% de los fondos destinados a sostener los recursos de personas sin hogar procedía de fondos propios.
Con motivo del Día de las Personas sin hogar, que se celebra este domingo 27 de octubre, Cáritas Española lanza su nueva campaña contra el sinhogarismo, bajo el lema «Caminemos Juntos», una iniciativa que busca visibilizar las dificultades a las que se enfrentan estas personas.
Esta campaña, a nivel nacional, se lleva a cabo junto a otras entidades como Faciam (Federación de Asociaciones y Centros de Ayuda a Marginados), XaPSLL (Xarxa d’Atenció a Persones Sense Llar de Barcelona), besteBI (Plataforma por la Exclusión Residencial y a favor de las Personas Sin Hogar de Bilbao) y el Ministerio de Derechos Sociales.
Sinhogarismo y el problema de la vivienda
La Campaña Nadie Sin Hogar, en esta edición, destaca que el sinhogarismo es un problema estructural que alcanza a miles de personas en España. Con el aumento de los alquileres insostenibles y la falta de vivienda pública, la crisis habitacional y la gentrificación empujan a muchas personas a situaciones de extrema vulnerabilidad, y Cáritas quiere subrayar que este problema requiere el compromiso de toda la sociedad y las administraciones.
“De forma alarmante, Cáritas es testigo de cómo sigue en aumento la vulnerabilidad en muchas personas y familias que no pueden acceder a su derecho a una vivienda digna y adecuada. Por ello, es necesario y urgente seguir sensibilizándonos como sociedad y continuar interpelando a las administraciones públicas, garantes de los derechos humanos, y al resto de la sociedad acerca de la realidad que están viviendo estas personas”, explica María Santos, responsable del programa de personas sin hogar de Cáritas Española.
En el contexto estatal y según recoge el INE (2022), hay 28.552 personas en situación de sin hogar, representando un aumento del 24,5% desde la última cifra publicada en 2012. Es necesario ser conscientes del sesgo que representa este dato, ya que deja fuera muchas situaciones de exclusión residencial que contempla la clasificación ETHOS, así como aquellas personas que no han estado atendidas por los recursos asistenciales o que viven en municipios inferiores a 20.000 habitantes. “Se prevé que el volumen real del sinhogarismo sea mucho mayor. Desde esta realidad, también se creó la Estrategia Nacional contra el sinhogarismo a España (2023-30). Estrategia, que debe convertirse en ley de obligado cumplimiento si queremos dar pasos hacia adelante”, apunta la responsable.
Acercándonos a la realidad de nuestra diócesis, la primera prioridad pastoral menciona el asunto de la vivienda como uno de uno de los graves problemas de las personas más vulnerables. Esto mismo constataban los datos recabados por las Cáritas parroquiales presentes en los barrios y pueblos de Málaga y Melilla en la Memoria de Cáritas Diocesana editada el pasado año. Del total de personas acompañadas: el 47,3% refería graves problemas con el pago de la vivienda, el 20% vivía en habitaciones -una cifra que va aumentando progresivamente en los últimos años-, el 6% en infraviviendas y el 4% en viviendas ocupadas. Solo el 6,8% cuenta con una vivienda social.
Un camino compartido
Desde Cáritas vemos día tras día que las personas en situación de sin hogar están en el último eslabón de la exclusión social y, aunque nosotros procuramos acompañar su travesía, vemos reiteradamente vulnerados sus derechos fundamentales. Las vulneraciones de los derechos suponen piedras en el camino de hombres y mujeres en situación de sin hogar, así nos lo cuentan y no podemos mirar para otro lado.
Este año, la campaña quiere hacernos ver que el camino de las personas sin hogar es parte de nuestro camino. En palabras de José Miguel Santos, director de Cáritas Diocesana, “no podemos dar un rodeo para evitar encontrarnos con ellas. Cuando nos acercamos, nos cuentan sus historias en primera persona: quiénes son, qué viven, qué buscan y qué esperan. Desde Cáritas queremos fijar la mirada en una de las cruces más dolientes de nuestras calles: las personas sin hogar. Su dignidad debe ser respetada. Debemos, caminando junto a ellas, abrir caminos a la esperanza. Pero una esperanza que tenga como punto de partida revertir las situaciones que las privan del calor de un hogar: el acceso a una vivienda, la falta de recursos básicos o la carencia trabajo”.
ALGUNOS DATOS SOBRE LA ACCIÓN DE CÁRITAS CON PERSONAS SIN HOGAR
En España
Cáritas Española acompañó el año pasado a 42.336 personas sin hogar, un 7,2% más que el año anterior, según la Memoria de actividades presentada el pasado mes de junio. Dos de cada diez son mujeres y la mitad, de nacionalidad española.
En Andalucía
Cáritas ofrece en Andalucía una red de apoyo y acompañamiento, que contó en 2023 con 360 plazas en centros residenciales, viviendas tuteladas y/o semituteladas, centros de día, servicios especializados en atención social, centros de acogida nocturna y un dispositivo de emergencia, además de la actuación de ocho proyectos de atención en calle.
Desde esta red, las Cáritas andaluzas consiguieron acompañar, durante el pasado año, a 4.800 personas sin hogar, gracias a la colaboración de más de 700 agentes voluntarios y 120 personas contratadas.
En cuanto a recursos económicos, las Cáritas andaluzas destinaron 4,2 millones de euros para sostener programas y centros para personas sin hogar, de los cuales un 56% procedían de fondos privados y el 44% de fondos públicos.
En Málaga
Para la atención y acompañamiento de las personas sin hogar, Cáritas Málaga contó el pasado año con 106 plazas repartidas en diferentes proyectos: Hogar Pozo Dulce, Calor y Café, Ntra. Sra. de la Merced, Hogar San Carlos, Casa Mambré y Apartamentos Ramón Buxarrais y Tomás de Cózar. En estos centros 28 trabajadores y 83 voluntarios atendieron a 328 personas.
También en la provincia, las Cáritas Parroquiales de Torre del Mar y Fuengirola desarrollaron proyectos en los que se atendieron a 125 personas en situación de calle.
Además de las personas acogidas en los centros residenciales que la institución tiene al servicio de estas personas. el Hogar Pozo Dulce cuenta, desde hace más de 20 años, con una Unidad de Calle formada por un técnico y 18 voluntarios que atendieron el pasado año a 72 personas en situación de calle con un alto deterioro personal. Siete de cada diez personas atendidas eran hombres. Lourdes Navarro, responsable de esta Unidad, destaca la importancia del trabajo que se realiza, pues asegura que “se trata de procesos que requieren de mucho tiempo y dedicación, y son fundamentales por los vínculos de confianza que se van generando. Gracias a la labor de este equipo muchas personas sin hogar logran salir de la espiral del aislamiento social cuando se sienten escuchadas, queridas y respetadas, dando el primer paso hacia la recuperación de sus vidas”.
Cáritas está presente en la oficina Puerta Única y forma parte también de la Agrupación de Desarrollo para personas sin hogar, en la que se integran distintas entidades sociales que trabajan en nuestra ciudad al servicio de los más pobres.
Casi el 70% de los recursos destinados a sostener las plazas de los centros para personas sin hogar de Cáritas Málaga procedía de fondos propios (698.221,90€) frente al 30% aportado por las administraciones (315.884,10€).
ANTE ESTA REALIDAD PEDIMOS:
Derechos humanos: Salud, vivienda, empleo…
– Garantizar una atención sanitaria, universal y gratuita de calidad para todas las personas, poniendo especial atención en las personas más vulnerables.
– Mejorar la atención desde el sistema de salud a los problemas de salud mental y trastornos de conducta de las personas sin hogar.
– Incrementar el parque público de viviendas protegidas. La vivienda es un instrumento fundamental para alcanzar la condición de ciudadanía de pleno derecho.
– Promover un enfoque de políticas de empleo para personas con un difícil acceso al mercado laboral, velando por una formación adecuada.
Protección Social y legal
– Impulsar los espacios de coordinación entre las administraciones públicas, especialmente en las áreas de vivienda, servicios sociales, salud y empleo.
– Una reforma de los sistemas de gestión de los Servicios Sociales, reduciendo y agilizando los trámites burocráticos y administrativos.
– Implementar los medios adecuados para garantizar que las personas sin hogar puedan empadronarse en los lugares que establece la legislación vigente.
– Lograr una garantía de ingresos suficiente para disfrutar de una vida digna.
– Incrementar los recursos dirigidos a personas sin hogar.
– Garantizar que las personas sin hogar puedan disponer de servicios suficientes y adecuados de higiene, alimentación o descanso.
Participación y redes de apoyo
– Cuidar y fomentar el establecimiento y fortalecimiento de las redes de cuidado mutuo, espacios relacionales, así como del tejido social, fundamentales para prevenir y evitar el aislamiento de las personas que se ven afectadas por procesos de exclusión social.
– Establecer mecanismos de participación de las personas sin hogar en la red existente de recursos.
Ante los discursos de odio
– En nuestra vida cotidiana, cortar los mensajes de odio, y no callar ni tolerar conductas que discriminen a nadie.
– Cambiar la mirada y romper los prejuicios, informándonos y tratando de comprender las causas que llevan a muchas personas a una situación de sinhogarismo y de exclusión social.
Actividad pública de sensibilización en Málaga
Las personas sin hogar necesitan ser vistas lejos de prejuicios y suposiciones, necesitan ser oídas, tenidas en cuenta en nuestra comunidad, en nuestras políticas. Por ellos y para ellos, Cáritas ha organizado un acto de sensibilización que tendrá lugar el martes, 29 de octubre, a las 12.00 horas, en la Plaza de Félix Sáenz.
En él participarán personas acogidas en los centros de Cáritas que, arropados por trabajadores y voluntarios, leerán un manifiesto y compartirán su testimonio de vida con todos los asistentes. Se unirán a este gesto otras entidades de la Agrupación de Desarrollo para personas sin hogar de Málaga.